La ONU estima que reconstruir Gaza costará 70.000 millones de dólares
La situación en la Franja de Gaza está desesperada. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) estima que se necesitarán al menos 70.000 millones de dólares para iniciar la reconstrucción de esta región, que ha sido devastada por un conflicto que ha dejado cerca de 68.000 muertos. Los daños son inmensos, y la recuperación será un proceso complicado, como señala el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
El representante del PNUD, Jaco Cilliers, afirma que más del 80% del territorio sufrió daños severos. En algunas áreas, el impacto llegó al 92%. Esto quiere decir que muy poco de Gaza quedó sin ser tocado por los bombardeos. A pesar de un cese al fuego, la crisis humanitaria sigue afectando a la población.
Primer paquete de ayuda: 20.000 millones de dólares
Para poder atender las necesidades urgentes de aproximadamente 2,1 millones de habitantes durante los próximos tres años, se requieren 20.000 millones de dólares en esta primera etapa. Este dinero se destinará a remover escombros, garantizar la seguridad en zonas afectadas—donde podrían quedar explosivos sin detonar—y restablecer servicios que son esenciales para la vida diaria.
Cilliers comenta que ya han movilizado unas 81.000 toneladas de escombros, utilizando cerca de 3.100 camiones para realizar este trabajo esencial. Las prioridades incluyen asegurar el acceso a hospitales y centros comunitarios, fundamentales en medio de esta crisis.
Sin embargo, todo depende de que se mantengan abiertos los puntos de acceso a Gaza. “Es crucial abrir todos los puntos de entrada,” enfatiza Cilliers, haciendo hincapié en las actuales restricciones impuestas por Israel.
Desde la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), la portavoz Olga Cherevko informó que Israel acordó permitir solo la mitad de los camiones humanitarios previstos. Esto es el resultado de que Hamas no ha cumplido con la entrega de todos los cuerpos de los rehenes, lo que ha llevado a una reducción a 300 camiones diarios, cuando se esperaba que fueran 600.
Recientemente, sin embargo, se han recibido miles de toneladas de ayuda, incluyendo gas doméstico, que no podía ingresarse durante meses. Esto ha permitido reabastecer hospitales, clínicas y panaderías, además de iniciar trabajos para reparar caminos y detectar explosivos.
A pesar de estos avances, la ONU señala que el flujo de ayuda humanitaria sigue siendo muy insuficiente frente a la magnitud del desastre. Los equipos internacionales continúan evaluando el estado de escuelas, centrales eléctricas y hospitales, en un esfuerzo que se prevé se extenderá por más de una década.