El ejército de Israel asalta embarcación de Global Samud
Integrantes de la flotilla internacional Global Sumud compartieron un video que muestra cómo el ejército de Israel interceptó una de las embarcaciones que se dirigía a Gaza para llevar ayuda humanitaria. Los activistas están detenidos y han denunciado cortes de comunicación, hostigamiento y ataques previos.
En un comunicado que se difundió en las redes sociales, la organización expresó que “las cámaras están fuera de línea y los barcos han sido tomados por personal armado. No hay confirmación sobre el estado de los participantes ni de la tripulación”.
El momento de la intercepción en Gaza
Este convoy utiliza unas 50 embarcaciones civiles y cuenta con la participación de activistas internacionales, parlamentarios y la famosa activista sueca Greta Thunberg. La misión humanitaria tenía como objetivo romper el bloqueo marítimo que enfrenta Gaza para entregar alimentos y productos de primera necesidad.
Pero el miércoles pasado, la flotilla fue interceptada por la Marina israelí. En el video compartido desde una de las embarcaciones, se puede observar el instante en que los efectivos del ejército abordan el barco y se disponen a detener a los tripulantes.
Los activistas informaron que varios barcos fueron abordados por personal militar. Además, se interrumpieron las comunicaciones, y muchos tripulantes siguen sin tener noticias sobre su situación. La flotilla había cruzado la zona de exclusión declarada por Israel, que se extiende a unos 200 kilómetros de la costa de Gaza, donde ya se han producido intercepciones en ocasiones anteriores. Testigos indicaron que al menos 20 barcos de guerra rodearon a las naves principales, incluida el Alma, el buque insignia de la misión.
Los activistas denunciaron que el barco Florida habría sido embestido intencionalmente, mientras que otras embarcaciones como el Yulara y el Meteque recibieron chorros de agua a presión del ejército israelí.
Detalles de la misión humanitaria en Gaza
La Flotilla Global Sumud, conformada por 500 activistas internacionales, zarpó en septiembre desde España con una consigna bien clara: llegar a Gaza y denunciar el bloqueo impuesto por Israel. Entre los tripulantes estaban la activista climática Greta Thunberg, Mandla Mandela —nieto de Nelson Mandela—, la eurodiputada Rima Hassan, la exalcaldesa de Barcelona Ada Colau y parlamentarios de Italia y Francia.
La misión no se limita solo al envío de suministros. El objetivo principal es desafiar lo que consideran un “bloqueo ilegal” y entregar ayuda directamente, sin intermediarios, como un gesto político y humanitario hacia el pueblo palestino.
Previo a la operación, la tensión ya era palpable. Los integrantes de la flotilla denunciaron “maniobras de intimidación”, como el acoso de un buque israelí que rodeó al barco Alma y hostigó al Sirius. También reportaron sobrevuelos de drones y ataques previos en aguas del Mediterráneo, donde aseguraron haber sido objeto de explosivos aturdidores y sustancias químicas durante una escala en Túnez.
La diputada francesa Marie Mesmeur relató cómo lanchas militares se acercaron a poca distancia e iluminaron las cubiertas con potentes reflectores. Por su parte, el activista David Adler alertó en redes sociales: “Nos estamos preparando para un ataque inminente. No opondremos resistencia”.