Trump establece aranceles a medicamentos, camiones y muebles
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acaba de anunciar una serie de nuevos aranceles a las importaciones. Entre ellos, destaca un gravamen del 100% a los medicamentos de marca y un 25% a los camiones pesados, que comenzará a regir a partir de la próxima semana. Según Trump, estas medidas buscan proteger la industria manufacturera del país y fortalecer la seguridad nacional.
Esta decisión genera preocupación. Las empresas globales ya enfrentan desafíos como las interrupciones en las cadenas de suministro, costos crecientes y una demanda incierta tras varios años de tensiones comerciales. La Reserva Federal también alertó que estas políticas podrían contribuir a aumentar la inflación en EE.UU., y los mercados reaccionaron con una notable volatilidad.
Además, Trump no especificó si estos nuevos gravámenes se sumarán a los aranceles actuales. Vale mencionar que existen recientes acuerdos con Japón, la Unión Europea y el Reino Unido que establecen límites para las tasas en sectores críticos como el farmacéutico. Por ejemplo, el pacto preliminar con Bruselas fija un tope global del 15%, asegurando que no se impondrán aranceles más altos.
Trump exime a quienes inviertan en EE.UU.
Un detalle importante en este anuncio es que Trump confirmó que el nuevo arancel del 100% a los medicamentos de marca solo afectará a las compañías que aún no inviertan en plantas de producción en EE.UU. Laboratorios como Roche y Novartis ya están lanzando proyectos de millones de dólares. Sin embargo, la industria europea ha manifestado preocupación por el posible impacto en pacientes y exportaciones. Por ejemplo, Irlanda, que es un gran proveedor de fármacos hacia Estados Unidos, anticipó estas medidas y sus exportaciones crecieron un asombroso 536% en los primeros siete meses de 2025.
Afecta también al sector del mueble
La acción comercial no se limita a los medicamentos; impactará también en el sector del mueble. A partir del 1 de octubre, entrarán en vigor aranceles del 50% a armarios y tocadores, y un 30% a muebles tapizados. Trump presenta estas medidas como parte de su promesa de “recuperar” las industrias locales. Sin embargo, sindicatos en Vietnam y grandes cadenas como IKEA advierten sobre posibles aumentos de precios y una creciente presión inflacionaria.
Enfoque en la seguridad nacional
Por último, el gobierno también está investigando la posibilidad de imponer aranceles por motivos de seguridad nacional en insumos médicos, maquinaria y robótica. Se ha enfatizado el uso de los gravámenes como herramienta de política exterior. A pesar de las preocupaciones sobre el impacto en los consumidores y el transporte, especialmente tras el anuncio de tarifas en camiones pesados, la Casa Blanca sostiene que los nuevos ingresos arancelarios podrían alcanzar los u$s300.000 millones este año.