El Gobierno designa a la Virgen de Luján como comandante de la Gendarmería
El Gobierno nacional ha reconocido oficialmente a la Santísima Virgen María como “Comandante Generala” de la Gendarmería Nacional Argentina. Esta decisión, plasmada en el Decreto 675/2025, se publicó en el Boletín Oficial y cuenta con las firmas del presidente Javier Milei y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. Sin duda, es un simbólico gesto que resuena en las tradiciones de nuestra patria.
Esta medida se basa en una devoción muy arraigada hacia la Virgen de Luján por parte de quienes integran tanto el personal superior como el subalterno de la fuerza. Según las palabras del decreto, “no hay elemento de la Gendarmería Nacional que no tenga entronizada y no sea venerada una imagen suya”. Esto muestra lo importante que es la figura de la Virgen en la vida cotidiana de quienes forman parte de la gendarmería.
En un poco de historia, en 1958, la Santa Sede proclamó el patronazgo de la Virgen sobre las Fuerzas Armadas argentinas. Más adelante, en 1975, la Virgen de Luján fue declarada oficialmente patrona de la Gendarmería a solicitud del entonces director nacional de la fuerza. Estos antecedentes reflejan cómo su figura ha estado presente en momentos cruciales de la historia del país.
Como parte de esta medida, se establece que las Fuerzas Armadas han distinguido históricamente a sus santos patronos con el máximo grado en la categoría de Personal Superior. Así, otorgar a la Virgen de Luján el título de Comandante Generala dentro de la Gendarmería Nacional era un paso lógico y necesario.
Además, el artículo 2 del decreto indica que el jefe de la fuerza debe adoptar “las medidas necesarias relativas a la entronización y honores militares pertinentes” para garantizar que se cumpla esta resolución de manera digna. Esto no solo formaliza un reconocimiento, sino que también invita a reflexionar sobre la devoción y la tradición que la Virgen de Luján representa para muchos argentinos.