Hidrovía: Nueva Licitación con Auditoría Internacional
El Gobierno argentino ha tomado una decisión crucial al anular la anterior licitación de la Hidrovía Paraguay-Paraná, un corredor vital para el comercio exterior del país. Esta nueva iniciativa busca optimizar la gestión de la hidrovía, que maneja aproximadamente el 80% de las exportaciones de granos, harinas y aceites, representando alrededor de u$s28.000 millones anuales.
Con la intención de finalizar el proceso de licitación para el primer semestre de 2026, se prevé la publicación de la documentación técnica entre octubre y noviembre. La meta es facilitar la transición al sector privado, buscando así reducir los costos logísticos que enfrentan los productores argentinos.

Auditoría Internacional y Transparencia en el Proceso
Esta nueva etapa de licitación incluye una auditoría internacional por parte de la UNCTAD, el organismo de Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo. Esta medida es fundamental para garantizar la transparencia del proceso, que anteriormente fue criticado por la falta de claridad. Según los responsables, cada paso será supervisado para evitar cualquier manipulación política o empresarial, enfatizando la importancia de un proceso limpio y legítimo.
Mesas de Trabajo y Participación
Para la elaboración de los nuevos pliegos, se han establecido mesas de diálogo en diversas localidades como CABA, Santa Fe y Rosario, donde participan entre 80 y 100 representantes de diferentes sectores. Esta colaboración busca generar consensos sobre el contenido del pliego, permitiendo una discusión más técnica y específica.
Uno de los aspectos más debatidos es el diseño de los anchos de canal y las zonas de sobrepaso, donde se han presentado propuestas concretas para mejorar la navegación. La discusión ahora se centra en problemas específicos, lo que facilita la identificación de soluciones, comentaron los involucrados.
Control Privado y Exclusiones
El nuevo pliego también mantendrá la prohibición de participación de empresas con control estatal extranjero, excluyendo a las dragadoras chinas. Esto responde a una política de soberanía sobre los recursos hídricos del país. Además, se asegurará que el proceso sea completamente privado, con un esquema donde el Estado actúe únicamente como un controlador activo a través de una mesa de inspección compuesta por usuarios y autoridades locales.
Revisión de Plazos y Tarifas
Otro de los cambios significativos es la reducción del plazo de concesión de 30 a 20 años, un tiempo considerado necesario para amortizar las inversiones en nuevas dragas. En cuanto a las tarifas, se establecerá un tope que no superará el costo actual, fomentando la competencia y una reducción en los costos logísticos.
Las autoridades aseguran que la optimización de los tiempos de navegación resultará en un ahorro significativo para las empresas. Un barco parado un día genera más costos que un peaje elevado, explicaron.
Futuro del Proceso de Licitación
Se espera que tras las mesas de trabajo en julio y agosto se convoque a una audiencia pública antes de proceder con el llamado formal a licitación. Las empresas tendrán entre 60 y 90 días para presentar sus ofertas, y se estima que entre 4 y 5 grandes dragadoras internacionales participarán, posiblemente en asociación con firmas locales.
El Gobierno tiene la certeza de que este nuevo proceso será altamente competitivo, ya que las empresas interesadas son las mismas que formaron parte de la licitación anterior, y están preparándose para ajustar sus estrategias a las nuevas condiciones.
Este esfuerzo por promover la transparencia y la participación activa en el proceso de licitación es un paso hacia la modernización y eficiencia en la gestión de la Hidrovía, asegurando así la competitividad de Argentina en el mercado internacional.
Para aquellos interesados en profundizar en este tema, no duden en investigar más sobre los detalles de la licitación y cómo pueden participar en futuras discusiones. ¡Tu voz puede marcar la diferencia!