La familia de Josué Salvatierra, un joven de 14 años asesinado junto a su novia Paloma Gallardo en Florencia Varela, sostiene que los cuerpos de ambos fueron plantados en el descampado donde fueron encontrados. Este trágico suceso, ocurrido a fines de enero, ha generado conmoción en la comunidad y ha puesto de relieve una serie de inconsistencias en la investigación.
El abogado de los padres de Josué, Carlos Dieguez, ha manifestado su desacuerdo con las conclusiones preliminares de la investigación, afirmando que los peritos sostienen que los cuerpos fueron colocados en la escena del crimen. Dieguez subraya que la escena habla por sí sola, sugiriendo que podría haber más detrás de lo que inicialmente se ha reportado.
Los detalles del crimen y la investigación en curso
Los jóvenes fueron asesinados con golpes en la cabeza, y en el lugar del crimen se halló una piedra con sangre. Se cree que sus pertenencias, como celulares y una tarjeta SUBE, fueron robadas durante el ataque. Este elemento ha llevado a los investigadores a considerar la posibilidad de que el crimen haya sido el resultado de un robo que terminó en homicidio.
Sin embargo, el asesor jurídico de la familia de Paloma, Aníbal Osorio, ha refutado la teoría de que los cuerpos fueron movidos, argumentando que el informe de autopsia y la evidencia forense indican que los adolescentes fueron asesinados en el lugar donde aparecieron. La discrepancia entre las dos partes resalta la complejidad del caso y la necesidad de una investigación exhaustiva.
Las evidencias y el contexto del caso
La secuencia de eventos previos al crimen también ha sido objeto de análisis. Un video que circula en redes sociales muestra a Paloma y Josué caminando hacia el descampado donde fueron encontrados. Esta grabación, capturada el 30 de enero, comienza en una zona residencial y sigue a los jóvenes cerca del puente de Bosques, desmintiendo rumores sobre su posible secuestro por un auto.
Los investigadores continúan buscando pistas y testigos que puedan ayudar a esclarecer los hechos. Con la detención de un sospechoso de 30 años en espera, el fiscal Darío Provisionato está en proceso de reunir más evidencia para formalizar su arresto.
- Ambos jóvenes fueron víctimas de un ataque brutal.
- Se encontró evidencia forense en la escena del crimen.
- Las familias de las víctimas continúan luchando por justicia.
Este caso ha dejado una profunda huella en la comunidad de Florencia Varela, donde las familias de Josué y Paloma buscan respuestas y justicia ante un hecho tan doloroso. La investigación sigue abierta y la presión por esclarecer los detalles del crimen es cada vez mayor.
Es crucial que los responsables sean llevados ante la justicia. La sociedad debe mantenerse alerta y exigir transparencia en las investigaciones que involucran a jóvenes inocentes. ¡No dejemos que sus voces se apaguen!
