El panorama del consumo en Argentina ha mostrado cambios significativos, con un crecimiento en el e-commerce que, sin embargo, no logra compensar la disminución de las ventas en los canales tradicionales. Especialistas advierten que el consumo se encuentra en un principio de recuperación, aunque aún es incierto su rumbo.
El presidente Javier Milei ha enfatizado que si el Producto Bruto Interno (PBI) está en crecimiento, el consumo no puede estar estancado. A pesar de sus afirmaciones, los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) revelan que las ventas en supermercados solo crecieron un 1,5% en febrero, con una caída del 0,3% respecto al mes anterior. Esto señala la primera disminución en la actividad económica tras diez meses de crecimiento.
¿Por Qué No Crece el Consumo?
El presidente Milei argumenta que las modalidades de consumo están cambiando, solicitando que se analicen los balances de las empresas dedicadas al e-commerce. A pesar de un crecimiento del PBI del 5,7% interanual, la realidad del comercio muestra que sectores como el comercio mayorista y minorista han avanzado un 7,4%, aunque la comparación se hace con un periodo muy bajo debido a la devaluación.
Para marzo, se anticipa una contracción del 1,2% en la actividad económica, aunque el crecimiento interanual sigue siendo significativo. Sin embargo, la industria y el comercio han sentido el impacto negativo, lo que plantea interrogantes sobre la sostenibilidad de este crecimiento.
El E-commerce y Su Crecimiento
El consumo a través del e-commerce está en aumento, con un crecimiento del 13% en la categoría de supermercados en el primer trimestre de 2025 en comparación con el mismo periodo del año anterior. A pesar de esto, el director de Scentia, Osvaldo del Río, sostiene que el consumo masivo en línea aún pesa relativamente poco en comparación con las ventas presenciales. Las ventas online han crecido un 8,4% en el primer trimestre, pero no son suficientes para contrarrestar las caídas en el consumo offline.
El informe de la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE) muestra que, aunque el e-commerce es el canal que mejor está desempeñándose, no se traduce en una recuperación generalizada. En el cierre de 2024, el crecimiento de las órdenes de compra fue solo del 5%, el más bajo en varios años, indicando una caída en el consumo general.
Perspectivas Futuras
La próxima campaña del Hot Sale espera impulsar las ventas, con más de 1.000 marcas participando. Sin embargo, la situación de los salarios privados, que han visto una pérdida del 4,9% de poder adquisitivo, plantea dudas sobre el verdadero impacto de estas iniciativas en el consumo. Mientras que los salarios públicos han logrado mantener su valor frente a la inflación, los privados siguen enfrentando dificultades.
La economía argentina se encuentra en un momento crítico donde el consumo y la capacidad de compra de los ciudadanos están en juego. ¿Logrará el e-commerce convertirse en el motor del consumo, o seguirá siendo un complemento de las ventas tradicionales? La situación requiere atención y estrategias claras para asegurar un crecimiento sostenible y equilibrado.
