Nayib Bukele Refuerza su Alianza con Donald Trump
En un contexto de crecientes tensiones en las relaciones exteriores de Estados Unidos, marcado por guerras comerciales y disputas sobre el gasto militar, el presidente Donald Trump ha encontrado un firme aliado en el mandatario salvadoreño Nayib Bukele. Este lunes, Bukele realiza una visita oficial a la Casa Blanca, destacando la estrecha colaboración entre ambos líderes.
Bukele aceptó recibir a cientos de migrantes deportados desde EEUU, quienes son vinculados por el gobierno norteamericano a pandillas o actividades criminales. Esta cooperación ha sido clave en la estrategia de Trump para acelerar la deportación de un millón de inmigrantes indocumentados antes del primer año de su segundo mandato.

Nayib Bukele, un Socio Clave para Washington
La visita de Bukele refuerza su posición como uno de los aliados más cercanos de la administración Trump, que ha tomado distancia de varios socios tradicionales. El presidente salvadoreño, conocido tanto por su popularidad como por su estilo autoritario, se autodenomina el dictador más cool del mundo y rey filósofo, mientras implementa políticas de seguridad que han sido criticadas por organismos internacionales de derechos humanos por violaciones sistemáticas.
A pesar de las críticas, dentro de El Salvador, su enfoque ha recibido un fuerte respaldo popular. Bukele, de 43 años, logró la reelección en 2024 con una victoria contundente.
Trump ha elogiado públicamente al mandatario centroamericano, refiriéndose a él como Presidente B en sus redes sociales y destacando su disposición a recibir a personas que considera algunos de los criminales más peligrosos del mundo.
Uno de los elementos más controvertidos de esta colaboración es el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), una megacárcel en El Salvador que Bukele ofreció a Estados Unidos como centro de detención para migrantes deportados, a cambio de un pago. Recientemente, un video publicado por el gobierno salvadoreño mostró el arribo de deportados en grilletes, lo que ha despertado críticas debido a la falta de evidencia que los vincule con actividades criminales.
Controversias y Críticas
Las autoridades estadounidenses han recurrido a la centenaria Ley de Enemigos Extranjeros para justificar algunas de estas deportaciones rápidas. Esta norma legal, originalmente pensada para tiempos de guerra, ha generado controversia. La Corte Suprema ratificó recientemente el uso temporal de esta ley, aunque ordenó que se facilite el regreso de un ciudadano salvadoreño deportado por error desde Maryland.
Sin embargo, la administración Trump ha minimizado su responsabilidad, argumentando que no tiene la obligación de gestionar directamente el regreso del individuo en cuestión, Kilmar Armando Abrego García. Según documentos oficiales, García permanece vivo y seguro en Cecot, aunque no hay claridad sobre los pasos concretos para su repatriación.
Consultada sobre si Bukele podría interceder en el caso durante su visita, la vocera de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, comentó que la orden del tribunal pedía facilitar, pero no ejecutar, su retorno. La cooperación con El Salvador está en su punto más alto, aseguró Leavitt. Apreciamos profundamente el compromiso del presidente Bukele y su apoyo en la repatriación de criminales que, bajo administraciones anteriores, lograron ingresar a nuestro país.
La alianza entre Bukele y Trump representa un giro en la política de colaboración de Estados Unidos con Centroamérica, evidenciando cómo las relaciones internacionales pueden ser moldeadas por intereses políticos y estratégicos en un contexto global complejo.